Alumnos
de telesecundaria toman sus clases en el patio de tienda cervecera
IGNACIO
CARVAJAL
Veracruz,
Ver.- Desde hace tres años, los alumnos de la Telesecundaria de la colonia
Francisco I. Madero no cuentan con un terreno para construir su escuela, han
tomado clases bajos los árboles, en la vía pública y en solares.
Ante la
falta de respuesta de la secretarías de Educación Pública (SEP) y de Veracruz
(SEV), ahora los 60 alumnos se distribuyen en una galera para cría de aves de
corral y en el patio de una tienda de abarrotes en la que igual se venden
cervezas.
La
directora del plantel, Elizabeth Hernández Hermida, contó a que lamentablemente
no han logrado que dos ejidatarios den sus firmas para obtener un terreno de 2
mil 500 metros cuadrados que demanda la SEP dentro sus normativas para
apoyarlos con el recurso para las aulas.
Afirmó
que la Telesecundaria no cuenta con nombre aún, pero si una clave, la
30DTV1860D, y el terreno donde están ahora lo alquilan por 800 pesos al mes a
los dueños de los abarrotes. En la secundaria hay al menos 60 alumnos en tres
grados, “ya salió la primera generación, sólo uno no fue al bachillerato, los
demás siguen. Son chicos con muchas ganas de estudiar. La mayoría de ellos
vienen de zonas marginales de esta comunidad y de otros pueblos”, comentó la
mentora.
Piedras
Negras, comunidad de Tlalixcoyan, se encuentra a 50 minutos del puerto de
Veracruz, y su fuerte son actividades relacionadas al campo y ganadería.
Hernández Hermida indica que la mayor parte de los ejidatarios de Piedras Negras
están de acuerdo con la escuela, pero hay dos a quienes no se ha hecho
entender. “Al parecer son intereses económicos por lo que no quieren soltar el
terreno”, dijo quien alquila el espacio actual a la escuela.
Reiteró
que la SEP tiene en sus normatividades, al destinar recursos para aulas, que el
terreno mida esa proporción, “nos daban un terreno de 2 mil metros cuadrados,
pero la SEP no quiso mandar el recurso por la normatividad”.
Ante
esto, solicitaron al gobernador Javier Duarte de Ochoa interceder con los
ejidatarios para lograr un acuerdo. La directora explicó que antes se
encontraba en una escuela en Cotaxtla, “porque me queda cerca, y por amor a la
educación, me encuentro acá”.
La
maestra recibe a este diario en una oficinita, en una humilde vivienda de
ladrillos, sin repello, sin clima, sin ventilador y con sus libros acomodados
en huacales. Publicado en La Jornada Veracruz.
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