Educación Inicial, vacuna contra el
fracaso: Schmelkes
HÉCTOR
ROJAS
Ampliar
la cobertura en educación inicial (hoy menor al 10 por ciento a nivel nacional)
y empezar por los sectores más desprotegidos de la sociedad, constituye una
vacuna contra el fracaso académico, social y profesional, enfatizó la
especialista en educación Sylvia Schmelkes.
A pesar
de que la Ley General de Educación, en su artículo noveno, especifica que el
Estado “promoverá y atenderá” todas las modalidades educativas “incluida la
educación inicial”, hasta 2008 la Secretaría de Educación Pública (SEP)
reconocía que la cobertura en esta modalidad de 0 a 3 años, era menor al 10 por
ciento.
Actualmente,
se calcula que en México existe una población de 10 millones de habitantes
entre 0 y 3 años de edad, rango de edad que es contemplada por la educación
inicial de la que habla Schmelkes.
“Ésta
es la edad más importante para educar, la primera infancia, porque de la
educación de esta fase, del desarrollo, depende gran parte de lo que ocurre
después con el ser humano, incluyendo lo que aprende y cómo le va en el sistema
educativo”, reconoció Schmelkes, durante la presentación del estudio Ahora es
cuando. Metas 2012-2024.
En este
estudio elaborado por la Organización de la Sociedad Civil Mexicanos Primero,
se señala como parte de las “transformaciones necesarias” del Sistema Educativo
Nacional (SEN), el articular para el 2019 la Educación Inicial con el sistema
de educación obligatoria.
No
obstante, para la académica del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo
de la Educación (INIDE) de la Universidad Iberoamericana (UIA), Sylvia
Schmelkes, este trabajo podría empezarse “desde ya”, por lo que resulta urgente
empezar a debatir el tema y proponerse metas desde ahora; utilizando la
desentralización educativa.
De este
modo, la cobertura de Educación Inicial, puede ser financiada por el Estado y
ser responsabilidad de las entidades federativas, quienes podrán identificar a
las comunidades más marginadas, y brindar este servicio.
De
acuerdo con Scmelkes, la estimulación temprana ayuda a que las personas a lo
largo de su desarrollo obtengan una mayor “integridad psicológica”, lo cual los
aleja de actividades delictivas y les facilita habilidades de socialización.
Por tal
motivo, el esfuerzo que el Estado pueda hacer para aumentar la cobertura en
Educación Inicial, puede contrarrestar de forma sistemática las brechas de
desigualdad social, así como la llamada predisposición genética, “es una vacuna
contra el fracaso”, reconoció Schmelkes. Publicado en Educación a debate.
No hay comentarios:
Publicar un comentario