El instituto
no debe ser un órgano persecutorio ni sancionador: Rueda Beltrán
No es viable convertir de pronto al INEE en
evaluador de 1.4 millones de docentes
Si se quiere
que la valoración de los maestros repercuta en una mejor formación de los
estudiantes se debe sacar del ámbito político, señala el presidente del
organismo
Laura Poy
Solano
El Instituto
Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) no puede convertirse en un
órgano persecutorio ni sancionador, advirtió Mario Rueda Beltran, presidente
del organismo, quien destacó que no es viable convertirlo de un momento a otro
en la institución responsable de evaluar a 1.4 millones de docentes en el país.
Destacó que
si se quiere que la valoración de los maestros repercuta en una mejor formación
de los estudiantes, se debe sacar al instituto del ámbito político, y
garantizar que quienes integren el nuevo INEE –que de acuerdo con la reforma
educativa contará con autonomía– tengan un perfil académico, porque un
organismo técnico no puede estar sujeto a criterios partidistas o
gubernamentales.
En
entrevista con La Jornada, Mario Rueda Beltrán afirmó que antes que cumplir
tiempos y fechas para la aplicación de exámenes estandarizados que miden el
desempeño de los docentes, se debe definir para qué queremos evaluar y cómo
vamos a atender las deficiencias que tengan los profesores.
Recomendable,
que mantenga su estatuto técnico
Tras
reiterar su deseo de ser considerado en la terna que se le presente al
presidente Enrique Peña Nieto para la elección de quien encabezará al nuevo
INEE, enfatizó que el organismo debería mantener un estatuto técnico y quedarse
a nivel de recomendaciones o de vigilancia, y no como una instancia sancionadora
del docente.
Destacó que
pretender transformarlo en un instituto evaluador de todo el magisterio
nacional no sería recomendable. Sería convertirlo de un momento a otro en un
organismo muy grande. Implicaría el entrenamiento de muchas personas y esto generaría
consecuencias.
Sin embargo,
reconoció que aún están a la espera de que se publique en el Diario Oficial de
la Federación la reforma educativa, en la que se establecen las modificaciones
al INEE para iniciar la discusión de las leyes reglamentarias, donde se deben
fijar con mayor claridad sus competencias.
Cuestionado
sobre las metas de evaluación docente determinadas por la autoridad educativa,
destacó que vale la pena darse tiempo para hacerlo bien, antes que llegar a
cumplir tiempos mal.
Señaló que
la aplicación en 2012 de la evaluación universal a profesores de educación
primaria en todo el país, con una baja participación de los profesores, dejó
claro que se había pactado más en un contexto de orden político en un momento
de elecciones. Esto evidencia que la evaluación está en un contexto político,
enfatizó.
Rueda
Beltrán agregó que más que establecer plazos debemos tener una buena discusión
sobre qué vamos a evaluar, cómo y para qué. Si logramos acordar entre los
principales actores cuáles son las funciones que cumple este ejercicio, esto
nos ayudará a ver en qué condiciones están los profesores en la escuela.
Si las
condiciones de trabajo son muy distantes de las exigencias, entonces quizás
deberíamos abrir tiempos para el desarrollo de las habilidades que le pedimos a
los docentes, antes que evaluar. Publicado en La Jornada
No hay comentarios:
Publicar un comentario