Publicación independiente fundada el 15 de mayo de 2009.

Director: Luis Gerardo Martínez García
Contacto: sinrecreo@hotmail.com
WhatsApp: 2281133188

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Lucha de docentes es equívoca, su verdadero enemigo son los sindicatos: Montfort
- "Afectar a terceras personas lo único que hace es hartar a la ciudadanía y alimentar un conflicto de desigualdad social que tiene encolerizado al país"
- Propone una solución de 3 pasos, empezando por cambiar dirigencias sindicales
- Lo que queda es luchar porque se aprueben leyes secundarias que apunten a tener funcionarios capaces y condiciones laborales adecuadas
Claudia Montero Xalapa, Ver.

La Reforma Educativa no es el enemigo del magisterio, los verdaderos enemigos de los docentes son los sindicatos que les obligan a hacer carreras sindicales en lugar de magisteriales y un gobierno que en complicidad con estas instancias ha hecho del orden educativo el sistema de rentas económicas más poderoso de todo el sector público.

Al referir lo anterior, el investigador de la Universidad Veracruzana (UV), Francisco Montfort Guillén, aseguró que es el sector educativo donde se han generado fortunas inmensas "porque todo mundo saca provecho de las rentas que se otorgan a través de los presupuestos públicos y eso es lo que los maestros deben poner a debate".

En este sentido, el investigador y analista dijo que desde el momento en que a los sindicatos les dieron el poder de decidir sobre las plazas y los puestos de dirección, "como en Veracruz que son ellos quienes ponen la subsecretaría del ramo" y desde que los presupuestos públicos se negocian con las elites sindicales, "desde ese momento se privatizó el sector educativo en México".

Por tanto, Montfort Guillén considera que la lucha magisterial con los diferentes movimientos y paros laborales en toda la república, es equívoca al perjudicar a la sociedad con "paros locos" y con marchas que afectan a terceros.

Y es que a decir del investigador, los maestros no están haciendo el trabajo político debido y están extremadamente confundidos porque la lucha de las dirigencias sindicales no es la lucha de los docentes.

El gremio debería luchar por tener una carrera profesional lo mejor diseñada posible que les permita un ingreso al sistema en condiciones de competitividad internacional y una permanencia adecuada a las necesidades del país con las condiciones laborales a la misma altura.

Con estas condiciones el desarrollo profesional tendría que recibir todo el respaldo del verdadero patrón, es decir, del gobierno en sus tres niveles, dejando a un lado a los sindicatos.

Por tanto y con respecto a lo anterior, el poder del magisterio no debe ser electoral sino educativo, y es ese el tema que los docentes no están manejando, definió el entrevistado al señalar que el movimiento magisterial no es sano.

"El afectar a terceras personas lo único que hace es hartar a la ciudadanía, provocar pérdidas a quienes no tienen nada que ver con su lucha y alimentar un conflicto de desigualdad social que tiene encolerizado al país".

Tanto quienes denostan a los maestros como quienes los apoyan están alimentado un conflicto en sentido estricto irreal, puesto que el problema del sistema educativo es solo de orden político y organizacional.

Explicó que en el orden político los maestros fueron encapsulados y lastimados de manera electoral mientras que en el ámbito organizacional el gremio no obedece a las necesidades de un verdadero magisterio que consiste en crear conocimientos, educar y hacer procesos de aprendizaje adecuados, "y nada de eso se está discutiendo".

Para el investigador de la máxima casa de estudios, los docentes pueden implementar una solución a través de 3 vías.

En este tenor dijo que como primer lugar los maestros tendrían que cambiar sus dirigencias sindicales para que sea la representación de la base quien pueda dialogar con las autoridades y hacer del sistema profesional un acuerdo con respecto a las verdaderas necesidades del sistema educativo.

En segundo lugar, deben velar porque sus condiciones laborales, no solamente sus salarios, estén acorde con esa exigencia nacional e internacional de educación de alta calidad.

Como tercer punto, mencionó que del lado de la autoridad se debe aportar con funcionarios cabalmente capaces y honestos.

"Esa es la solución, no hacer marchas y paro de labores perjudicando a la sociedad. El poder del magisterio no debe ser electoral, debe ser educativo y ese es el que no están manejando".

Montfort Guillén reiteró que la lucha de los maestros debe buscar condiciones dignas de trabajo al dar clases, al estar frente a los alumnos, al crear material didáctico, cuando está investigando y en el momento de enseñanza aprendizaje; es decir, cuando cumplen su función de docente.

"Por eso su reclamo debe ser contra sus dirigencias, deben tomar su destino en su propia mano".

Aseveró que el deber de los maestros es estar frente a grupo y establecer relación directa con los titulares de cada escuela para fincar su propio camino en materia de calidad educativa, "eso es lo que requieren los maestros, no apoyar un movimiento que poco tiene que ver con ellos, porque a final de cuentas la ley constitucional ha sido ya aprobada".

En consecuencia, lo que queda al magisterio es luchar porque se aprueben leyes secundarias que apunten a tener funcionarios capaces y condiciones labores adecuadas pero sin que sea intermediario el sindicalismo que ha privatizado la educación pública y que se ha hecho dueño de la educación en México.

"Esta privatización de la educación a través de los sindicatos es lo más dañino que se ha podido hacer en la educación de país y contra esas dos cuestiones es contra las que tiene que luchar el magisterio; los sindicatos y los malos funcionarios que pactan con los mismos".


La solución, dijo, no es fácil y se torna bastante compleja, "tomará bastante tiempo", sin embargo, para llegar a un buen término los maestros deben actuar en ambos sentidos y con total independencia y libertad. (alcalorpolitica)

No hay comentarios:

Publicar un comentario