Ni herencia de venta de
plazas en el SNTE, asegura Juan Díaz
Segunda de cuatro partes
Por Jimena
Saldaña
Ciudad de
México.- A propuesta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación se
estableció la Ley de Servicio Profesional, con lo que se evita la herencia de
plazas en el magisterio, aseguró el líder magisterial Juan Díaz de la Torre al
tiempo de advertir que todos los maestros comisionados cobran el sueldo que
corresponde a su plaza, pero cancelan toda forma de ascender profesionalmente.
Si bien
reconoció cierto rezago educativo en nuestro país, afirmó que el promedio de
escolaridad se ha elevado durante los últimos decenios. La situación es que el
escenario cambió y México no es la excepción. Maestro Juan Díaz, uno de los
asuntos más criticados por la sociedad es el hecho de que las plazas de los
docentes, se heredan, ¿qué pasará con esas plazas? .
Me parece
importante aclarar primero, que por ley el Sindicato como tal, tenía la
posibilidad en términos legales de proponer el 50 por ciento de las plazas de
nueva creación --aclaro las plazas de nueva creación--, y el otro 50 por ciento
lo tenía la autoridad.
Por ello no
era una ilegalidad. El Sindicato buscaba apoyar como existe en muchas otras
vocaciones, como los ingenieros o los abogados, a las familias que compartían
las vocaciones.
Las
propuestas que el Sindicato hacía en relación a los hijos o los familiares de
los maestros era con esa característica, pero además cubriendo el perfil que
está establecido en la Ley para que alguien pudiera acceder a una plaza.
Segundo, a partir del 2008, el Sindicato propuso en el marco de la Alianza por
la Calidad de la Educación, dejar ese 50 por ciento, y ponerlo en la mesa.
Le dijimos a
la SEP, pongan su 50 por ciento y vayamos a concurso. Por ello desde 2008 no
hay ni herencia, ni venta de plazas que el Sindicato esté propiciando.
Y este
proceso ya quedará establecido en la Ley del Servicio Profesional Docente; el
Sindicato lo propuso ya no se heredan más las plazas. ¿Cuántos maestros hay
"comisionados" en el país? ¿Cree que se justifican? Bueno es muy
importante esa pregunta porque representa la posibilidad de clarificar algunos
criterios. Yo puedo hablar de los que son comisionados sindicales, que hay dos
categorías: Una, la de los comisionados sindicales con goce de sueldo y la otra
de los comisionados sindicales sin goce de sueldo.
Establecidos
por ley también; no es una prebenda o un acuerdo político. Existe la
posibilidad de que los maestros vayan a una comisión que les avale el Sindicato
pero sin goce de sueldo y que el compañero la requiere para asuntos
particulares, para estudiar por ejemplo, entre muchas otras posibilidades. Esas
comisiones sindicales son sin goce de sueldo; es decir, el compañero se retira
a esas tareas que él define y se nombra a otro maestro para que cubra esas
funciones con el techo financiero, o sea, con los recursos económicos que están
asignados a esa plaza que entró en licencia.
La segunda,
la otra vertiente, que también son comisionados sindicales que encabezo yo;
como el primer comisionado sindical. Esos comisionados sindicales que estamos o
que nos desprendemos de nuestras plazas y nos incorporamos a la Dirección
Sindical. Desde el Comité Nacional y contando cada una de las secciones somos
2,656 compañeros.
No son los
que designa Juan Díaz o los que dice el secretario general de Veracruz, el de
Chihuahua o el de Aguascalientes, son los compañeros que eligieron los maestros
legalmente en sus congresos y que están acreditados como representantes
sindicales ante el Tribunal Federal de Conciliación y que son los que llevan la
relación laboral, profesional, prestacional con la SEP, con el ISSSTE con los
institutos de seguridad social, es decir, con todas las instancias con las que
el magisterio tiene relación.
Pero en todo
caso, esa cifra que cité y los compañeros que son comisionados de forma
transitoria, son las comisiones por las que responde el Sindicato. Ahora es
importante mencionar que los comisionados sindicales que nos desprendemos del
grupo y que gozamos del sueldo que teníamos con la plaza que ostentamos,
renunciamos a poder ascender y alcanzar cualquier promoción. Es decir, si yo
por ejemplo al incorporarme a la Dirección Sindical en mi sección, primero en
el estado de Jalisco y ahora en la nacional, ya no estoy en carrera magisterial
que es un estímulo muy importante y si estuviera porque me hubiera incorporado
antes de ser dirigente sindical, no podría ascender. Es decir, los comisionados
sindicales efectivamente cobramos nuestro sueldo en nuestra plaza pero no hay
forma de ascender profesionalmente.
En todas las
dependencias, en todas las Secretarías de Estado existen comisionados
sindicales, no quiero decir con esto que sea justificable, lo sería si no se
cumplieran los objetivos de la comisión sindical, a que nos dedicamos los
comisionados sindicales.
Tenemos más
de un millón y medio de trabajadores, y créamelo, no es exagerado decir que
cada maestro, o cada trabajador de la educación administrativa o de personal, o
de apoyo y asistencia en la educación o directivo, supervisor, jefe de sector,
cada uno es un caso. Desde el punto de vista salarial, prestacional,
profesional, cada maestro es un caso, y diario, todos los días, se presentan
millones de incidencias de la relación de los maestros con su materia de
trabajo y con sus derechos como trabajadores.
Esos
comisionados que acabo de mencionar, a lo que nos dedicamos es a gestionar
todos los asuntos de esos maestros y que tienen una primera virtud, que impiden
que el maestro abandone su grupo para hacer gestión de sus propios asuntos.
La sociedad
debe saber que los comisionados sindicales a eso nos dedicamos, no somos
"aviadores"; detenemos nuestro desarrollo profesional y no podemos
aspirar a elevar nuestra categoría en términos de percepciones salariales.
Ahora
Jimena, también lo digo, si alguno de estos comisionados no está cumpliendo su
responsabilidad y lo asume como una beca o una posibilidad de descansar, hay
que denunciarlo.
El compañero
debe de ser consciente de que si tiene una comisión es para cumplir y
representar con dignidad a los maestros, ayudarlos a escuchar sus asuntos y
eventualmente a resolverlos a favor. No hay trucos, no hay ilegalidad, esa es
la realidad del tema de los comisionados.
Ahora hay
muchos más comisionados, que no son las comisiones sindicales, muchísimos. Por
ejemplo si la Secretaría de Educación en una entidad genera un programa, y le
parece que lo deba desarrollar un compañero que tenga el perfil curricular, lo
identifican, y lo comisionan, lo sacan de su centro de trabajo y lo incorporan,
no de "aviador", sino para desarrollar o estar al frente de un programa
como en el ejemplo que le estoy dando.
Esos son
otro tipo de comisionados, y son miles, pero no los comisiona el Sindicato.
Tampoco descalifico esa labor. La realidad es que las necesidades que las
dependencias tienen en las entidades, son muchas de capital humano, capacitado,
conocedor, seguramente regularizar esta situación es algo que la reforma debe
plantearse como un reto.
Maestro Juan
Díaz, ¿qué papel debe jugar el SNTE en el desarrollo del país y cómo combatir
al desprestigio que actualmente hay en la sociedad con respecto a los maestros?
Bueno, lo primero que requerimos es afirmar la unidad del Sindicato, porque el
Gobierno federal y los Gobiernos estatales y la sociedad, --aunque esta última
no lo conozca quizás de manera puntual--, requieren un Sindicato fuerte, único,
con capacidad de interlocución.
Se requiere
un Sindicato que garantice que la representación de los maestros les dé
certeza, seguridad laboral, certeza jurídica, atención a sus asuntos, el
planteamiento de sus aspiraciones para mejorar su calidad de vida. Un Sindicato
con esas características requiere representarlo no sólo con dignidad sino ir al
siguiente paso, buscar el que todas las propuestas que hemos hecho, que haremos
y que seguiremos haciendo, --y es parte de la autocrítica y que lo planteamos
en el propio discurso del día 15 de mayo en el homenaje a los maestros--
revisemos la forma en que hemos presentado nuestras propuestas y planteamientos
sobre el tema educativo, para que al presentarlos de mejor manera, la sociedad
nos perciba de forma diferente.
No porque
las propuestas que hayamos hecho no correspondan, a este sentido, sino que
debemos expresarlas y comunicarlas de mejor manera. Por ejemplo, Jimena esta
entrevista, es una oportunidad extraordinaria para lograrlo. Cuando nació el
INEE nosotros lo planteamos, antes con un carácter autónomo de pleno desde el
2011.
El concurso
de oposición para que los mejores maestros accedieran a las plazas de nueva
creación, lo propuso el Sindicato, a lo mejor no lo hemos comunicado adecuadamente
y se asume como que estamos defendiendo algunos privilegios o prebendas, pero
no es así.
En esta
etapa en la que me corresponde ahora encabezar al Sindicato junto con un gran
equipo de compañeros, me lleva a la necesidad de transformar nuestras forma de
hacer las cosas para comunicarlas de mejor manera y al mismo tiempo entender
que si el país está evolucionando hacia una serie de retos de dimensión
extraordinaria --y que habían estado detenidas los últimos años--, el Sindicato
no puede quedar al margen.
Por ello
estamos teniendo una relación, como usted ya lo dijo, de diálogo y comunicación
con el Pacto, con los partidos políticos, con los legisladores, con senadores,
diputados, con los empresarios. La semana pasada me reuní con los dirigentes de
la Coparmex, con las universidades, con la ANUIES, con los representantes
académicos de la universidad.
Nuestro
diálogo y compromiso de debatir juntos con el rector de la UNAM, con los
señores gobernadores, con las asociaciones de padres de familia, etcétera. Para
mí el papel del Sindicato es mostrar un rostro moderno, un rostro con visión de
futuro, comprometido con las instituciones del país, con las transformaciones.
No tenemos
por qué hacerlo de otra manera y no sólo acompañarlos, sino de ser posible,
ponernos por delante de esas reformas. ¿Hasta dónde considera usted que es
responsable el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación en el rezago
educativo que enfrenta nuestro país? Esta pregunta es también muy importante.
Primero, el SNTE
no forma a los maestros en las normales; segundo, el SNTE no administra los
recursos de la educación y en tercer lugar, el SNTE no elabora los planes y
programas de estudio. Todo el mapa curricular, es la autoridad quien lo genera.
Los maestros lo desarrollan.
El SNTE,
representa a los maestros. Con esto no quiero evadirme ni decir que somos lo
mejor que este país tiene. Lo que es importante es conocer cuáles son los
alcances, los límites y el espacio de acción que el Sindicato tiene como tal.
Lo que debemos hacer todos, es asumir.
Nosotros
como representantes de los maestros, y aquellos que afortunadamente son los
menos, que han buscado desacreditar a los maestros. Ningún país en el mundo ha
alcanzado el desarrollo educativo pleno, a partir del descrédito y de la
descalificación de los maestros.
Por el
contrario, los padres, el Gobierno federal, los Gobiernos estatales, los
empresarios, los legisladores, el Sindicato, debemos asumir juntos este reto.
El SNTE no dice en dónde se genera una escuela ni a cuál se le mejora su
infraestructura. Es decir, es limitado, pero sí tenemos que asumir. No quiero
plantearlo como una evasiva, pero la responsabilidad que tenemos de
desarrollarnos profesionalmente, el contenido de los modelos de capacitación y
de acompañamiento profesional, no los define el SNTE.
Creo que es
un asunto que al estarse debatiendo de esta manera, es rico en posibilidades,
porque puede generar la posibilidad del gran consenso, para que juntos más que
buscar responsables y señalamientos, juntos entendamos que debemos de ir hacia
delante.
Esa es la
vocación del Sindicato y hoy particularmente como dirigente del Sindicato, esa
es mi convicción y el mandato que tengo de mis compañeros, a partir de que tomé
en mis manos la responsabilidad de dirigir al Sindicato.
En su
opinión, ¿qué principios rectores deben guiar a la educación en México? Los que
dice la Constitución. Esta ahí, parece que es un asunto que ya no hay que
hablar, pero en la medida que esté presente siempre en los maestros, en el
Gobierno, en los padres de familia, los partidos políticos, en todo, en las
iglesias inclusive, debe plantearse el reto de preservar el contenido
filosófico del tercero constitucional: la gratuidad, la laicidad, la
obligatoriedad, la calidad y la equidad. Porque al final de cuentas es grave lo
que sucede en el país.
Por ejemplo
los 26 estados en donde hay educación indígena, en que se da este desarrollo
educativo, pues es muy diferente en Nuevo León, que en Chiapas o en las zonas
marginadas, que en las urbanas de clase media, o en las áreas deprimidas. No se
trata de evadir, simplemente de reflexionar, pues en todas es el mismo
Sindicato. Lo importante es que estos principios se mantengan vigentes y que la
proyección y los objetivos del sistema educativo, se planteen a mediano y largo
plazo.
Los procesos
de la educación no son de coyuntura deben de plantearse a largo plazo y
asumirse como una política de Estado.
Los
objetivos en educación deben plantearse mucho más allá de un sexenio, para que
se le dé una formación integral al ciudadano mexicano y se definan los
objetivos a largo alcance y todos vayamos empujando y no haya rompimientos cada
tres o cada seis años.
Según el
INEGI la población de más de 15 años cuenta con un promedio de 8.6 grados de
escolaridad, muy por debajo del estándar de naciones desarrolladas ¿qué papel
juegan los más de millón y medio de maestros en esta situación y qué hacer para
cambiarla? Primero, hay que decir que este promedio, se ha elevado, a partir de
que la educación fue durante decenios la política pública más importante; lo
que dio esa posibilidad de permeabilidad social, de ascenso social, y de
estabilidad en el país.
La situación
es que el escenario mundial cambió y México no es la excepción; si antes los
jóvenes de Baja California se iban a estudiar a Guadalajara o al Distrito
Federal, porque no había universidades --o normales superiores en el caso del
magisterio--, hoy, la referencia no somos nosotros hacia adentro del país, la
referente es el mundo.
Y al ponernos
a competir estos niveles de escolaridad hay que modificarlos y al hacerlo en el
tema educativo, es fundamental que los maestros vayan al frente acompañando
este gran esfuerzo, esta gran cruzada.
No sólo en
el mejoramiento de los índices porcentuales de escolaridad, sino en la equidad,
la pobreza y la marginación. De otra manera es imposible pensar que se pueda
dar ese desarrollo.
En ese
proceso que estoy realizando, en esta gira que estoy haciendo por el país,
estoy teniendo comunicación, no sólo con los dirigentes sindicales o con la
autoridad educativa y el Gobierno estatal, sino que estoy teniendo comunicación
directa con los maestros.
Voy a las
escuelas, para desde ahí ratificar el conocimiento de lo que está sucediendo en
cada una. Lo que he encontrado es un compromiso profundo de los maestros por
hacer lo que están haciendo.
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